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España empieza a convertirse en una referencia vegana

El respeto por la salud animal es uno de los valores que más se han inculcado en los últimos años tanto en España como en el resto del mundo. Ese es el motivo por el cual el veganismo viene ganando tanto terreno en los últimos años. Hace falta un cambio de conciencia en todo el mundo y no cabe la menor duda de que apostar por el bienestar animal es algo que nos convierte en una sociedad mejor, más moderna y más capacitada para vivir en armonía con el resto de seres vivos que pueblan el mismo planeta que nosotros.

¿Es España una referencia en lo que tiene que ver con un plano como del que estamos hablando? Lo vamos a ver a continuación, pero creemos conveniente hacer un análisis previo, un análisis que refleje cómo era la situación antes de la explosión del veganismo en todo el mundo. En España, el consumo de carne o de productos de charcutería era bastante grande hasta hace no demasiado tiempo. Éramos de los países que más la consumían y eso tenía un impacto sobre nuestra alimentación, un impacto que no era demasiado positivo. Ese consumo de carne, muchas veces desmedido, ocasionaba que tuviéramos una de las tasas de obesidad más grande de todo el mundo.

Según una noticia publicada en la página web del diario 20 Minutos a principios del verano de 2021, casi el 8% de la población de este país ya era vegana, una noticia muy positiva en lo que respecta al respeto por el mundo animal. Aunque no se trata de un porcentaje que sea mayoritario todavía, está claro que refleja el nacimiento de una tendencia que, a buen seguro, va a seguir creciendo y que ha puesto en el mapa una necesidad, la de cuidar del bienestar animal, que debería acompañarnos durante el resto de nuestras vidas.

Ese porcentaje implica un crecimiento importante sobre los datos que se recogieron un año antes, en 2020. Según un estudio de Statista, el porcentaje de población vegana en España ese año era del 3%, por lo que se evidencia que se ha experimentado un crecimiento notable, en concreto del 5%, en un periodo de tiempo muy reducido y que tan solo ha sido de un año. ¿Qué es lo que podemos extraer como conclusión de todo ello? Que el veganismo va a ser una opción cada vez abrazada por más gente y que se va a seguir desarrollando a gran velocidad durante los próximos años.

En el estudio que os acabamos de mencionar se clasifican los mejores países en lo que respecta al porcentaje de vegetarianos y veganos que existen en su interior. India es un país de referencia en este sentido puesto que uno de cada tres ciudadanos son vegetarianos (si bien la opción vegana no se ha estudiado para ese caso en concreto). El Reino Unido, con casi un 26% de vegetarianos y algo más de un 4% de veganos, se colocaba en segunda posición y la tercera era para una Alemania que contabilizaba un 17% de vegetarianos y un 5% de veganos. En esta clasificación, España ocupaba la novena posición con un 7% de vegetarianos y ese 3% de veganos al que hemos hecho referencia, una cifra que ya hemos dicho que ha crecido.

El veganismo llega incluso hasta los postres 

El veganismo empieza a formar parte activa de nuestras vidas y una de las cosas que mejor lo pone de manifiesto es la cantidad de opciones veganas que tenemos en cada vez más sitios. ¿Sabíais que incluso es posible consumir postres veganos en la actualidad? Desde Crudicakes nos han indicado que es una opción bastante habitual sobre todo entre personas jóvenes y que se trata de una cuestión que dispone de un amplio margen de crecimiento todavía. Si se mantiene la tendencia que llevamos en los últimos tiempos, está claro que el consumo de postres veganos va a ser una opción mayoritaria y que deje de ser considerada como una opción ‘alternativa’.

Debemos construir una sociedad más responsable con su entorno, pero también responsable con todo lo relativo a la alimentación propia. Abusar de la comida animal no es lo idóneo para el mantenimiento de un buen estado de salud, así que el veganismo es una opción interesante para todas aquellas personas que no solo estén interesadas en mantener el bienestar animal, sino también para conseguir un buen estado de salud personal. No está de más que luchemos por ello, sobre todo teniendo en cuenta que hay muchos motivos por los cuales el bienestar de las personas también se encuentra amenazado. Luchar contra esa amenaza es nuestra obligación… y el único camino para ser felices.

 

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