Según los últimos datos, los españoles y españolas somos cada vez más ecológicos. Sí, es verdad, por empezamos a tener conciencia del grave problema medioambiental al que está asistiendo la humanidad, y que ella misma ha provocado.
La instalación de paneles fotovoltaicos, de sistemas de climatización geotérmicos el uso térmico de la biomasa, empieza a ser algo habitual en los hogares españoles. Así mismo se ha multiplicado el consumo de productos ecológicos y el número de huertos urbanos. La mayoría ya recicla y lo de reutilizar empieza a ser una costumbre entre los más ecológicos. Reducir el consumo energético es el reto al que habremos de enfrentarnos si queremos poner fin a esta desastrosa situación que nosotros mismos hemos generado.
Mi hermana y su pareja son completamente ecos, o al menos eso intentan. Por supuesto siguen a raja tabla la reglas de las 3 R, reduce, reutiliza, recicla, tiene paneles fotovoltaicos, cultiva su propio huerto sin añadir pesticidas ni químicos de ningún tipo, son veganos, apenas usan el coche, sólo cuando es estrictamente necesario, han instalados en los grifos sistemas reductores de caudal, en fin, y más cosas que ahora mismo no puedo recordar. Hasta los adoquines del jardín son ecológicos, y disponen de un separador que permite crecer la hierba en su perímetro. La verdad es que son ideales para la zona del aparcamiento de coches y bicis. Los han comprado en Eiros, una empresa especializada en la fabricación y distribución de elementos prefabricados de hormigón para edificación, obra pública y urbanismo, que comienza su actividad en la década de los 60 gracias al empuje empresarial de D. Carlos Eiros Cachafeiro, que es pionero en la fabricación de bloques prefabricados de hormigón en Galicia. Hoy en día, son una de las empresas líderes en el sector de la fabricación de bloques de hormigón.
Las comunidades más ecológicas de España.
Actualmente existen en este país numerosas personas que se dedican a la agricultura ecológica, que se presenta, además de como fuente de autoconsumo, como una oportunidad de negocio seguro. Es un hecho que los consumidores y consumidoras demandan productos ecológicos, productos libres de venenos y químicos. Much@s son los que han sabido aprovechar esta tendencia emprendiendo con un negocio de agricultura ecológica.
Esto choca bastante con la arraigada costumbre española de destruir, tanto la naturaleza como los animales que habitan en ella, pero parece que esta tendencia se está invirtiendo, especialmente en algunas comunidades autónomas como Andalucía, Navarra o La Rioja
En España se están empezando a hacer las cosas bien, y eso es todo un logro teniendo en cuenta la tradición que arrastramos.
La comunidad andaluza se presenta como líder en agricultura ecológica con más de 800.000 hectáreas, la mayor parte destinadas a la producción de fresas, setas, aceite o legumbres.
Navarra ha puesto en marcha un plan para la gestión de basuras domésticas, es decir, para el reciclaje de materia orgánica para su recuperación como compostaje. Varias mancomunidades navarras destacan por esta labor.
La Rioja cuenta con una privilegiada zona que ocupar aproximadamente la cuarta parte de la comunidad y que forma una reserva de la biosfera de un valor ambiental incalculable. Además, es pionera en la instalación de paneles solares en zonas aisladas.