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El buen bebedor de vino tiene que saber esto

Hay palabras que deberían ir siempre juntas en el diccionario. Me refiero a que por ejemplo cuando piensas en vacaciones siempre te viene a la memoria, la playa. Lo mismo ocurre si decimos, Navidad, pues seguro que te venga cena familiar. Pues bien, a mí me pasa cuando se dice España, que mi mente siempre va directo al vino. Y es que no entiendo el concepto de este país sin este elemento. Los datos así lo dicen.

El sector vinícola tiene una importancia vital en España, no solo desde el punto de vista económico o medioambiental, sino también desde el social y cultural. Y es lo  que yo me refiero, que detrás de cualquier evento siempre hay una copa de vino. Tinto, blanco, dulce o fortificado, el vino es una de las bebidas preferidas para acompañar las tradicionales tapas y también un elemento socializador clave. No en vano, España se encuentra entre los diez mayores consumidores de vino en el mundo, aunque no alcance los niveles de países como Estados Unidos o Francia. Quizá por eso, nuestro país no logre clasificarse entre los cinco primeros cuando se habla del consumo por persona. Y es que, el país queda muy lejos del volumen que los portugueses, líderes mundiales en este aspecto, beben de medía al año.

Tienes que tener en cuenta que  España cuenta con 941.086 hectáreas de viñedo en 2021 (aprox. el 13% del total mundial). Somos el primer viñedo del mundo. Nuestra producción media anual de vino y mosto es de entre 40 y 42 millones de hectólitros (40,5 millones en 2022). Además, somos el tercer productor mundial. La facturación de las bodegas españolas asciende a 5.381 millones de euros al año (solo vino y mosto) y la actividad de la cadena de valor vitivinícola supone el 2,2% del Valor Añadido Bruto en España.

Lo que no puede faltar en tu casa

Así pues, ahora que conocemos las teoría, es el momento de la práctica. Te vamos a dar una serie de recomendaciones y de utensilios que tienes que tener en casa si quieres seguir disfrutando de la calidad de los caldos tan excelentes que tenemos en España.

Vinotecas

Por supuesto que no pueden faltar. En el mercado hay de vinotecas pequeñas con capacidad inferior a 50 botellas de vino y de vinotecas más grandes con capacidad de hasta 300 botellas, como nos indican desde Giona Company. Hay modelos que van desde las vinotecas baratas más sencillas con refrigeración termoeléctrica, a las vinotecas más sofisticadas que incorporan sistemas de refrigeración por compresor,  preservación y dispensación de vino por copas.

Dispensador de vino por copa

El uso de dispensadores de vino por copas te va a permitir tanto controlar la temperatura de los vinos como preservarlos de la oxidación, ya sea con gas argón o con nitrógeno. Cada vez que sirva una copa, ésta tendrá exactamente la misma calidad que una botella recién abierta, manteniendo todas sus características unas 3 semanas. Una gozada y algo muy original.

Escarchadores

Los escarchadores o enfriadores de copas permiten enfriar de forma espectacular y eficiente la cristalería en segundos, evitando el goteo de copas y vasos, así como la descongelación de los hielos. Y es que utilizar otro tipo de métodos para enfriar la cristalería puede provocar cambios en el aroma o el sabor de la bebida ya que el hielo, al derretirse, puede «aguar» la copas, el refresco o cualquier otro tipo de bebida.

Cubiteras

Ahora puedes comprar cubiteras de hielo originales, realizadas en acrílico o acero inoxidable de alta calidad, en varios colores y formas, de diseño clásico o vanguardista y de diferentes capacidades que permiten ser personalizadas a gusto del consumidor, algo que aseguran desde Giona Company gusta mucho a las personas que les gusta beber vino.

Entre nuestras cubiteras más originales encontrará cubiteras de hielo transparentes con forma de bolsa para regalo, cubiteras alargadas horizontales para cuatro botellas, cubiteras con luz led en su base, e incluso con cubiteras con forma de champanero.

Como has podido comprobar, el vino contribuye a que España pueda mejorar su imagen como país y es un polo de atracción de visitantes y turistas; tenemos un sector responsable y sostenible, con su entorno y con las personas que nos rodean; es motor de desarrollo en muchos pueblos y ciudades pequeñas de nuestra geografía, vertebra el territorio y ofrece empleo de calidad; es símbolo de tradición pero también es puntero en innovación e investigación; es el reflejo del buen de hacer de miles de empresas y viticultores en todo el país. Brindemos por ello, pero siempre con vino.

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